11 mandamiento: no protegerás pederastas bajo la santidad de mi nombre. Primer envío a la curia peruana
Este es un proyecto postal que lleva el evangelio del mensajero como la palabra posible apoyada en una ficción desesperada que no termina siendo más que otro acto de fe. Quizá lo primero que empezamos a amar de manera intangible es un idea de Dios que sale de la boca de nuestros padres. Ellos señalan el camino hacia lo sagrado, sin embargo, la fe puede traicionarnos y ser trastocada.
El evangelio del mensajero lanza el undécimo mandamiento: No protegerás pederastas. Lo dice un niño destruido que lleva entre las manos la propia edificación de su nombre, tantas veces deformado detrás del poder, o bajo una iglesia que sobre la que ya no se posa la fe.
La postal es una liturgia que maldice pederastas mientras es leída, y será enviada a la mayor cantidad posible de autoridades eclesiásticas. Un primer envío ha sido hecho a la curia peruana. Posteriormente las postales serán enviadas al Vaticano para que el mensaje sea leído por los cardenales que elegirán al nuevo Papa y sepán que hay un mandamiento más, una ficción verdadera, apócrifa y válida.
Las siguientes imagenes son del envío de las postales con el 11 mandamiento para la curia peruana.
